CENTRO CULTURAL SAN FRANCISCO SOLANO

BOLIVIA 2024: EL FISCAL GENERAL SALE POR LA VENTANA

Por Edgar Ramos Andrade (*). El Alto, ANC 21 octubre 2024

1. Este mes concluye la gestión de seis años del fiscal general del Estado, Juan Lanchipa. Y, como lo habíamos anticipado en septiembre reciente, esa autoridad sale con pena –huye– por la ventana y con escándalo. Es la síntesis de su vergonzosa –y manipulada– defensa a un expresidente procesado por pedofilia y otros delitos.

Caso Beni

2. La Fiscalía General del Estado ya había demostrado debilidad institucional, luego que el año 2017, en la elección judicial del Beni, hubo doble fraude, electoral y judicial cometido por el entonces candidato, hoy magistrado del Tribunal Supremo de Justicia, Carlos Alberto Egüez Añez, quien hizo secuestrar a una notaria electoral en la comunidad indígena Misión Fátima, municipio San Borja.

3. En ese caso, durante los años 2018 y 2019, la Fiscalía Departamental del Beni investigó a Egüez hasta que el magistrado aludido hizo aprobar tres resoluciones judiciales en un día, aquel 21 de febrero 2020, y la Fiscalía General les quitó respaldo a los fiscales benianos y dejó impune a un magistrado elegido con fraude electoral comprobado.

4. En ese mismo proceso, el año 2019, el magistrado Egüez –autoridad de la vergüenza judicial y beniana– apareció en un audio en el que dicta (por teléfono) a un juez penal cómo emitir una sentencia, para que lo libere de la investigación fiscal que lo tenía cercado por las pruebas en su contra. Otra vez, Lanchipa abandonó a los fiscales del Beni.

Caso Tarija

5. Hace pocas semanas, la Fiscal Departamental de Tarija fue echada de su cargo por el aun fiscal general y sus desaforados gritos. El motivo fue que la fiscalía tarijeña convocó al ex presidente Morales a declarar en una investigación penal por embarazo a una menor de edad y cuyo padre fue detenido hace muy poco.

6. En este caso, Lanchipa tuvo que aceptar, a su pesar, el retorno de la fiscal tarijeña a sus funciones por una orden judicial. O sea, el Fiscal General atropelló a una Fiscal Departamental y tuvo que ser un juez quien intente hacerlo razonar.

 

7. Una situación parecida pasó en Tarija los años 2019 y 2020, con el entonces fiscal departamental Aimoré Álvarez, quien luego de ser sustituido, reveló que varias citaciones y conminatorias de los fiscales, emitidos a finales del año 2019 y principios del 2020, tenían poco sustento jurídico.

 

Criterio político partidario

 

8. Los casos de las fiscalías departamentales, de Tarija y Beni, demostró que en las acciones del Fiscal General prevalece el criterio político partidario, y se descarta la defensa de la ley 260 o la persecución penal ecuánime. Ni hablar del caso Sergio Martínez-Mónica de la Riva, ésta fiscal que es de antología (delincuencial).

9. Ergo, la Fiscalía General gestión 2018-2024 es el ejemplo de cómo se mal-maneja la administración de justicia en Bolivia.

10. La mayor contribución del Fiscal General saliente fue aumentar la corrosión –putrefacción– del sistema de fiscalías. Ojalá esta autoridad de dudosa conducta no aparezca en poco tiempo –cual paracaidista– como Viceministro, igual que su antecesor, Ramiro Guerrero, tan o más nefasto que Juan Fausto Lanchipa Ponce.

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(*) Edgar Ramos Andrade es escritor.